No será fácil la emisión de bonos soberanos atados a la producción futura de litio. Expertos consultados explicaron a EL DEBER, que si bien la operación puede ayudar a traer dólares se tendría que revisar la actual Constitución Política del Estado (CPE), que, según los entendidos, limita este tipo de movimientos.
En una entrevista con el medio especializado, Bloomberg, el actual ministro de Economía, Marcelo Montenegro, informó que la administración del presidente, Luis Arce, estudia emitir bonos verdes con valor de hasta $us 1.000 millones.
Incluso informó al portal especializado, que funcionarios bolivianos se han reunido con instituciones en Nueva York sobre la posible emisión, pero declinó nombrarlas.
Análisis
El especialista, Jaime Dunn, sostiene que este tipo de operación son normales en los mercados internacionales, pero observa que en el caso de que Bolivia decida emitir estos bonos se tendría que revisar la actual CPE que prohíbe realizar estas operaciones.
“No se está explicando cómo realizarán esta operación; si pondrán la fe del Estado en juego o recurrirán a mecanismos de financiamiento estructurados”, sostuvo.
Explicó que la propuesta de utilizar el litio como respaldo para estos bonos plantea varios desafíos.
Mencionó que el caso de Chile, se emitió bonos verdes para el litio chileno con una tasa del 3,5% anual, pero advirtió que la situación sería diferente para el Gobierno boliviano debido a su baja calificación crediticia.
Los bonos verdes son mecanismos de financiamiento destinados a energías renovables y otros fines ambientales, es importante entender que generalmente son emitidos por empresas, no por el Gobierno. Sin embargo, los gobiernos sí tienen la capacidad de emitir bonos verdes soberanos.
Hizo notar que el riesgo de endeudar al país usando recursos naturales como garantía, lo que podría tener consecuencias negativas para las futuras generaciones.
Es más, anticipó que estas acciones podrían llevar a una mayor desconfianza de los inversionistas y a un deterioro de la situación económica.
Agregó que en la comunidad internacional de inversionistas busca garantías para mitigar riesgos. Por ejemplo: utilizar el litio como garantía, venderlo por anticipado o estructurar financiamientos donde los flujos del litio respalden los pagos. Estas medidas, según él, reducirían el riesgo percibido por los inversionistas.
Pero deja en clara que la actual CPE limitan estas operaciones.
El artículo 350 sostiene que “cualquier título otorgado sobre reserva fiscal será nulo de pleno derecho, salvo autorización expresa por necesidad estatal y utilidad pública, de acuerdo con la ley”.
El especialista advierte una falta de claridad en los detalles y el potencial conflicto constitucional generan preocupaciones.
Falta de dólares
En esa línea, el economista Germán Molina señaló que la emisión de estos bonos puede atraer muchos inversores en momentos en que el Estado necesita tener disponibilidad de dólares para atender sus gastos, en especial el servicio de la deuda.
“Es la forma más rápida para obtener dólares y desarrollar el litio. Pese que no se han logrado una producción a escala internacional y la operación implica riesgos siempre se genera expectativa”, señaló el economista.
Explicó que la operación implicaría poner como garantía la producción futura que genera el salar de Uyuni.
Desde el año 2018 el Estado boliviano a través del Banco Central de Bolivia (BCB) han logrado vender más de Bs 13.129 millones en diferentes instrumentos financieros.
Esta cifra representa una cantidad significativa que se aproxima a los $us 2.000 millones en emisiones, abarcando moneda nacional y Unidades de Fomento de Vivienda (UFV) en el último periodo. Pero la mismas siempre han sido observados por lo especialista por las altas tasas de interés.