Samuel Doria Medina y el expresidente Eduardo Rodríguez Veltzé se pronunciaron para reclamar al Movimiento al Socialismo (MAS), a Evo Morales y al presidente Luis Arce por los retrasos en la industria del litio.
Estas manifestaciones ocurren un día después del manifiesto del presidente Luis Arce, quien denunció que potencias extranjeras y un país vecino buscan controlar el litio y “balcanizar” al país.
Doria Medina
Samuel Doria Medina, líder de Unidad Nacional, se refirió a las pérdidas en el sector y que así concluye el desborde ideológico del MAS.
“Así termina el desborde ideológico del MAS en el campo del litio. Prometieron baterías bolivianas, gastaron 1.000 millones de dólares, gozaron una década de aplausos, viajes y grandes sueldos, y terminaron procesados por no poder hacer bien unas piscinas. Bolivia tiene una planta de carbonato de litio sin materia prima, pese a ser el país con más recursos de litio del mundo”.
“Las pérdidas de este despropósito son mucho mayores de la que se han cuantificado; han perjudicado al país históricamente. Y las responsabilidades políticas llegan más allá, alcanzando a Evo Morales y sus ministros. La verdadera auditoría del litio se hará después de 2025”, escribió en la red social X.
Rodríguez
A su turno, Rodríguez Veltzé señaló que Luis Arce está en la obligación de transparentar los convenios y alianzas con extranjeros para la explotación del litio porque el pueblo merece estar informado.
“El pueblo, único titular de la soberanía, merece estar bien informado sobre la administración de sus recursos naturales por la gravedad de la denuncia del presidente”.
“Lo obliga a transparentar los convenios o alianzas con potencias extranjeras para su explotación. Como país pacifista que promueve la cultura de paz e integración de los pueblos, urge también conocer su política exterior con los países vecinos y la comunidad internacional”, posteó el letrado y político.
Industria del litio
Estas posturas tuvieron reacciones inmediatas por las aseveraciones de Arce sobre el litio.
“Bolivia se ha convertido en un punto de interés para las potencias mundiales; así como para un país vecino que busca controlar nuestros recursos estratégicos a través de operaciones especiales, bloqueo de nuestras exportaciones, incumpliendo el Tratado de 1904 o la promoción de consejos empresariales para el control del litio”, sostuvo Arce.
Además, Yacimientos de Litio Bolivianos informó en las últimas horas que el Estado sufre un daño económico por Bs 425 millones causado por exfuncionarios. El viceministro de Explotación Energética, Raúl Mayta, aseveró también que 18 piscinas del complejo de Uyuni no operan por estar en deterioro.
Via: LA RAZÓN